sábado, 30 de abril de 2011

Metamorfosis imprescindible


Pájaro en vuelo

He violado las lindes de condiciones previas
me despedí, aliviada, de humanos atavíos
y me dejé las alas
y no le hui a la pluma
haciendo verdadero mi revuelo y escándalo.

Me negué a las palabras manchadas de cerebro
y aposté a rescatarlas en un pecho de pájaro.

Qué parto laborioso desandar las arterias
desnudarme de vísceras demasiado pesadas
simplificar el nervio, condensar los tejidos...

Ese labrar adentro luchando por sus músculos
me bajaba los párpados y me abría pupilas.
éramos un gemido oscuro que elegía
la célula indecisa donde nace la vida...

Pasó la primavera, tornaba el aguacero
crecían los muñones tercos de mis espaldas...
Me parí años enteros impotente y pletórica
monstruosa y vulnerable....
La ansiedad de la curva despegó mi estatura
y en un cielo de marzo me volé...¡ golondrina!


(Escribí este poema en época difícil; a veces la poesía es un verdadero antídoto contra la desesperación.)

miércoles, 27 de abril de 2011

Nos cuesta envejecer...


mar de fondo



Alcanzó cumbre la ola

a punto de volcar

su caudal portentoso

y resolverse en apenas

espuma confundida

después del tronar

de lo volcado...

allá en la orilla

Momento de torsión

fuerza contra sí misma

condenada a resolverse en

onda para...

ya marea de fondo

formar la próxima

que viene...







viernes, 15 de abril de 2011

Expedición a Cahuelmó

Cahuelmó, sur de Chile

A Juanito Lohidoy que en Pto. Montt (sur de Chile) debe seguir contando historias parecidas




La mujer de Feldessen, la gringa que hablaba raro, estaba de nuevo en Puerto Mont.

Esto me lo contó el argentino y reconozco que, para ser fiel a la historia, tendría que pedirles primero que imaginen el invierno del sur. Hacerles sentir que estamos sentados en torno de la estufa bien cargada donde humea la tetera y los ponchos empapados. ¡Es rico ese ambiente, bueno para el pecho, dicen por el vapor…

viernes, 8 de abril de 2011

Poema del relevo

Boomerang
A mi madre

Ya soy tú.
Vengo a buscar la noche
dormida en tus rodillas.
Estoy pronta.
Es verdad, quise huirme
pero toda distancia
se tornaba parábola.
En cada paso me acechaba
un boomerang asesino.
Me creía granada
en un eterno agosto
y me abría en setiembre
por todos los costados.
 "No mires hacia atrás
porque te hielas"
y me fui
y me volví porque me iba...
Lo que me disparó
me tornó al arco.
Yo me creía alondra
sola, a contraviento
pero volaba
hacia el eterno nido.
Cuando corté las raíces
a tajos desolados,
no sabía que tan solo podaba
porque era el tiempo
preciso para hacerlo.
Ahora lo sé.
Para que tú te vayas
me siento en la desvencijada silla
de las abuelas
e inicio la mecida
extiendo sumisa las manos
y acomodo la noche-leopardo
en mis rodillas...


sábado, 2 de abril de 2011

Amar nuestro destino tanto...



Esplendor en la hierba


Amar nuestro destino tanto

que dispuestos a volverlo a vivir

sea cual sea

despojemos la culpa de su tallo.

Pero…

cómo asumir que no hay destino que amar

cómo que ni hado

ni ángel

ni demonio nos rondan

Como la hierba innumerable

como las aguas en aluvión

como las hojas holladas de los caminos

¡somos!



sábado, 26 de marzo de 2011

Vuelve la luz...


Peral en flor- Van Gogh

Vuelve la luz y…

la memoria que hibernaba

despierta.

Todos los signos han confluido

en una sopa mágica que sabía la abuela...

capaz de  resucitar muertos.

Sí, Primavera sabe...

es cosa de

ligustro florido

tilo cargado

lucero vespertino o matutino

(es igual)

una brisa templada

(de esas que orean invisibles pañuelos

que tienen que ser blancos)

cierto tono de hierba cortada a mediodía

eso…

y el canto de un libro en el bolsillo…






domingo, 20 de marzo de 2011

Sí, siempre duele abril...

Mano de mujer con pluma


Sí, siempre duele abril...

( el mes más cruel del año...dicen)

pero a mí...marzo me duele

con esa pena atroz que es impotencia pura.

Sé que debiera hacer todo eso que los libros estúpidos recomiendan....

respirar hondo, cortar flores, comprar un sentimiento, regalarme una alondra...

Pero sé que solo se trata de esperar que llegue mayo con su cara de oro

y ponga el mundo  derecho sobre el eje...

Mientras...

Como dijo don Quijote aquella vez

¡Juro señora, por vuestra belleza que yo no puedo ver...!


Nada... ahora...

 es hora de cubrirse, acezar en lo oscuro, y...

apuntarse a crisálida.